Semana Santa

La Semana Santa, es la semana previa a la Pascua.
¡En Sevilla, la Semana Santa es una tradición! Es la semana religiosa más importante, llena de tradiciones, procesiones, emociones, vestimentas y hasta platos especiales.
En esta semana se conmemora el sufrimiento de Cristo, y el elemento principal son las impresionantes procesiones, que se pueden ver durante todo el día en las calles de Sevilla.
En la ciudad se vive una atmósfera emocional con un profundo significado religioso.
Las procesiones son organizadas por las diferentes Hermandades de la ciudad.
Comienzan en la iglesia de su Hermandad, luego van a la Catedral y regresan nuevamente.
En ricamente adornados pasos, se encuentran las grandes y pesadas imágenes de Jesucristo sufriente y de la Virgen María doliente. Para llevar los pasos, a menudo se necesitan hasta 50 hombres, pero se considera un gran honor poder llevar el paso. Durante el recorrido, se debe detenerse repetidamente para dar descanso a los portadores y, cuando se reanudan, el público vitorea.
Originalmente, las procesiones eran procesiones de penitencia. Incluso hoy en día, muchas personas penitentes participan en ellas. Lo que más destaca es su vestimenta, que consiste en una túnica larga y un capucho puntiagudo. Los capuchones están destinados a la anonimidad del penitente. Los diferentes colores representan las diferentes hermandades.

Las procesiones suelen ir acompañadas de una banda musical que toca música melancólica, tambores, campanas e incienso. Sin embargo, también hay procesiones en las que se guarda silencio total.
Los espectadores a lo largo de la ruta dejan que sus emociones fluyan. El público vitorea, grita, aplaude y algunos lloran de emoción.
Anualmente, Sevilla se ve invadida por personas que quieren vivir la Semana Santa, por lo que es importante llegar temprano para conseguir un buen lugar a lo largo de la ruta. Es impresionante vivir de cerca la procesión desde los estrechos callejones. Pero si no puedes soportar la multitud, es mejor mantenerte en las calles más anchas.
Consejo: la salida del paso de la iglesia de la Hermandad de Santa Cruz es espectacular, ya que hay muy poco espacio para los portadores. Es todo un arte lograr sacar el paso sin accidentes.